Reloj de bolsillo MOLNIJA 3602 reloj mecánico ruso de barco único pintado a mano

• Reloj de bolsillo mecánico ruso pintado a mano por el fabricante MOLNIJA.
• 18 piedras rubí, cuerda manual, escape de ancla
• Estuche pesado de alpaca
• En la contraportada un bello cuadro, pintado a mano (firmado por el pintor) sobre porcelana
• ¡Un raro objeto de coleccionista!

Este reloj es único y trae consigo un gran logro del artista.

En la contraportada una hermosa foto pintado a mano (firmado por el pintor) en porcelana - una copia reducida del conocido pintor ruso del siglo XIX. Siglo Ivan Aiwazovsky 1817-1900.

Le aseguramos que este reloj no es de producción masiva, sino de una pequeña edición limitada de aprox. 100 piezas y que este modelo no se puede encontrar en ninguna joyería.

Un raro reloj de bolsillo mecánico ruso con la marca "MOLNIJA" GOST 10733-98
Una verdadera pieza de coleccionista hecha de artículos de stock antiguos (NOS, New Old Stock). Movimiento de calidad mecánica, ya que ya no se fabrica en este rango de precios.

Año de fabricación: 2000

Los documentos originales de MOLNIJA con un breve manual de instrucciones están en ruso, alemán, inglés y francés.
Embalaje de plástico estándar: el original de MOLNIJA está incluido en el volumen de suministro.

APARATO DE RELOJERÍA:
3602 Calibre Molnija, cuerda manual, 18 joyas, equilibrio en espiral Breguet, oscilación de escape de equilibrio 18000, reserva de marcha cuando está completamente enrollado: más de 38 horas

FUNCIONES:
Visualización de tiempo: horas / minutos / segundos

INDICADORES | SHOW:
Segundero pequeño en la posición 6

CAJA:
Alpaca pulida, vidrio plástico, diámetro: 50 mm (con corona de 60 mm), altura: 15 mm, placa de porcelana pintada a mano en la contraportada

MARCAR:
Esfera: blanca, agujas: acero de color negro, dígitos: oro realzado, índices / escalas: negro

MOLNIJA 3602
El Molnija 3602, que se fabricó durante casi cincuenta años, entre 1960 y 2008.

Se remonta al Cortebert 616 producido en Suiza en los años 30/40, cuyas máquinas probablemente se vendieron luego a Rusia.

Con el paso del tiempo esta obra se ha ido modificando varias veces, sobre todo se ha incrementado la altura de construcción en más de un milímetro, y la decoración se ha vuelto cada vez más económica, hasta que al final casi no se aplicaron cortes decorativos u otras decoraciones.